Si fuiste a ver Mad Max: Fury Road y te quedaste con ganas de ver a Tom Hardy conducir por otra hora y media, hablar más de dos líneas seguidas o solamente buscas algo
que contraste con lo que generalmente te ofrecen los cines en el verano, entonces esta es
la película para ti. Locke es la historia de John Locke (Hardy) un supervisor de
construcción que la noche anterior a uno de los días más importantes de
su carrera abandona su puesto y conduce hasta Londres. ¿Por qué lo hace?
es mejor descubrirlo al ver la película.
Locke es lo que se conoce como
"Bottle Film" o película de botella. Un Film de botella es
cuando la acción esta situada en solo uno o dos lugares y con un limitado
numero de personajes. Como ejemplos de este tipo de cintas tenemos a 12 Angry
Men (1957) Reservoir Dogs (1992) y recientemente Buried (2010). En Locke la historia se desarrolla completamente dentro el interior del auto
mientras que John se dirige hacia Londres y tiene conversaciones telefónicas con distintas personas. De hecho, toda la duración de la película
el único actor en pantalla es Hardy quien logra convencer del conflicto tanto interno como externo por el que atraviesa su personaje. Lo anterior crea en ocasiones una atmósfera claustrofóbica
que deliberadamente refleja el estado de ánimo del personaje principal.
El experimento funciona debido a la increíble actuación y presencia de su estrella y la fuerza del guion que mantiene tu interés durante los 84 minutos del trayecto. Si Fury Road es esencialmente un ejemplo de cine mudo debido a su énfasis en el movimiento y la acción; Locke podría ser una obra de teatro o un drama de radio pero las dos son buenas películas que merecen ser vistas. Recomendaría ver las dos como función doble o al menos en una misma semana para recordar como el cine puede ser genial por razones muy diferentes.
El experimento funciona debido a la increíble actuación y presencia de su estrella y la fuerza del guion que mantiene tu interés durante los 84 minutos del trayecto. Si Fury Road es esencialmente un ejemplo de cine mudo debido a su énfasis en el movimiento y la acción; Locke podría ser una obra de teatro o un drama de radio pero las dos son buenas películas que merecen ser vistas. Recomendaría ver las dos como función doble o al menos en una misma semana para recordar como el cine puede ser genial por razones muy diferentes.
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